lunes, 12 de abril de 2021

Reseña: La cámara sangrienta, de Angela Carter

Imagen en blanco y negro con tonos de lila de estanterías. En el centro hay un libro abierto. Encima, en letras góticas negras, pone "La cámara sangrienta". Arriba a la izquierda en letras de imprenta lilas, pone "Reseña".



Ficha técnica:

Portada de la edición ilustrada de La cámara sangrienta, de Angela Carter, con ilustraciones de Alejandra Acosta, traducción de Jesús Gómez Gutiérrez y edición de Sexto Piso.
Título: 
La cámara sangrienta
Título Original: The Bloody Chamber and Other Stories
Autora: Angela Carter
Año de publicación: 1979
Páginas: 180
Género: Fantasía, Gótico
Sinopsis:  Esta es una colección de diez relatos explícitamente basados en cuentos de hadas, con claras influencias de la narrativa del Marqués de Sade. Angela Carter afirmó que se sentía impelida a escribir «cuentos góticos, cuentos crueles, cuentos de terror, narrativas fabulosas que tratan directamente del imaginario del inconsciente». Así, estos relatos ahondan en temas de feminismo y metamorfosis, con un énfasis especial en los roles de las mujeres en las relaciones, en los aspectos inmorales y perversos del matrimonio y el sexo, y en el equilibrio de poder en esas relaciones. Como muchos críticos han comentado en las últimas décadas, el motivo por el que La cámara sangrienta deslumbra con brillantez es que consigue ilustrar un argumento feminista realmente moderno: que las mujeres tienen un poder y unos derechos inherentes, así como la responsabilidad de utilizar el primero y reivindicar los segundos.

Reseña:

Angela Carter fue una periodista, feminista, poetisa y novelista que nació en 1940 en Eastbourne, Inglaterra. En 1965 publicaría su primera novela, Shadow Dance, seguida de su primera colección de poemas, Five Quiet Shouters, en 1966. Seguiría publicando varias obras, incluyendo la famosa The Magic Toyshop (La jueguetería mágica, 1967) consiguiendo un público más o menos fiel y escaso. Fue en 1978 que publicaría la pieza de no-ficción feminista The Sadeian Woman and the Ideology of Pornography, centrada en la obra del Marqués de Sade, y que tocaría la mayoría de los temas que luego tocan los diez relatos que componen la antología de La cámara sangrienta (The Bloody Chamber and Other Stories, 1979).

Antes de empezar con la reseña, me gustaría comentar que este libro no tiene Trigger Warnings impresos en ninguna de sus ediciones, pero sí que los requiere. Las Advertencias de Contenido que yo he encontrado para el primer relato, el titular "La cámara sangrienta", son: arañas, asesinato, mutilación, sangre y vísceras, tortura y violación. El resto de relatos comparten estas advertencias y añaden: abuso animal (leve, no gráfico), abuso sexual infantil, bestialismo, canibalismo, embarazo, incesto, menstruación, monsterfucking, necrofilia, ratas, sexo entre animales y sexo sin animales. También cuentan todos los relatos con machismo criticado.

El primer relato de la antología (que realmente tendría tamaño de novela corta) es el homónimo "La cámara sangrienta", también el relato más largo y conocida de ésta. Un retelling del cuento Barba Azul, de Charles Perrault, con influencias de Justine (1787), del Marqués de Sade, Carter utiliza esta narrativa para demostrar y criticar los roles de género, además del machismo inherente en los cuentos de hadas y la violencia con la que se trata a las mujeres en ellas. Con una prosa lírica, exhuberante y sensual, Carter aboga por una mujer dueña de sí misma y libre de las expectativas patriarcales.

Las siguientes historias son dos retellings de La bella y la bestia, en conversación entre sí, dos caras de la misma moneda. Les sigue una sátira de El gato con botas, un relato basado en una leyenda alemana (the Erlking), una viñeta de Blancanieves y una historia de vampiros. Tres historias de licántropos cierran la antología, dos versiones distintas de Caperucita Roja y una de la primera versión conocida de ésta: De puella a lupellis seruata, de Egbert de Liège. Además de todas estas referencias, los relatos incluyen también referencias a otros cuentos de Perrault, a más historias del Marqués de Sade, a Alicia en el País de las Maravillas y a muchas otras historias infantiles y/o centradas en lo macrabro, lo sexual y lo gótico.

Estos nueve relatos me han producido sensaciones mucho más complejas. Algunos de los relatos no son claramente (ni ligeramente) feministas, mientras otros parecen existir en un plano puramente gótico y otros exploran partes del feminismo íntimamente ligadas al descubrimiento sexual y a "la bestia interior", algo para lo que yo soy ni de cerca el público objetivo. Sin embargo es cierto que esta antología está centrada y unida por la presencia de sus mujeres: mujeres que reclaman su sexualidad (heteronormativa) para su propio disfrute y que suelen luchar contra la objetificación de sus cuerpos y deseos.

Literariamente, esta obra es extremadamente voluptuosa y rococó, demostrando una descipción sensorial extravagante y lujuriosa que evoca, matiza y revela, añadiendo complejidad, niveles y, como le gusta decir a Carter, un complicado sistema de cajas chinas, una dentro de la otra. El elemento gótico de las obras de carter se revela no sólo en su lenguaje, si no también en su forma de enfocar las obras, centrándose en el horror de lo cotidiano y lo atractivo de lo desconocido.

En resumen, recomiendo encarecidamente la novela corta "La cámara sangrienta" a toda la gente que sea capaz pese a sus advertencias de contenido, pero recomiendo más cautela a la hora de atreverse con el resto de la antología. ¡Y, por supuesto, comentadme vuestras opiniones!

2 comentarios:

  1. ¡Muy buenas!
    La verdad es que me deberían tirar para atrás la montonera de TW pero ciertamente... me llama la atención. No descarto leerlo, la verdad. El tema del tratamiento de la mujer en los cuentos de hadas sí, normalmente está rodeado de machismo, así que me llama la atención ver de qué forma lo haya reenfocado Carter en esta antología.
    De todos modos, visto lo visto, iré con cuidado y para un día que me apetezca algo del estilo. A mí lo que más me tira para atrás no son los TW, sino más bien el estilo que parece ser un poco enrevesado, para mi gusto. Igual me equivoco. No eras ni de lejos el publico objetivo, estoy de acuerdo, pero al menos has podido terminarlo (?)

    Espero que si me pongo un día con él esté más cerca de ser su público objetivo jaja ya te contaré. A mí sí que me llama la atención el feminismo en torno al descubrimiento sexual, no nos vamos a engañar.

    Abrazo y gracias por la reseña!

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    Respuestas
    1. ¡Buenas, Stiby!

      Lo cierto es que la montonera de TW es seria, pero están todos centrados en un contexto muy claro así que es normal que te llame la atención, la verdad, ya creía que te pasaría.

      El estilo varía mucho pero probablemente se te hará enrevesado, sí, así que ánimo cuando te pongas. Como has dicho tú sí que eres más el público objetivo, así que estaré pendiente de tu comentario.

      ¡Abracitos!

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